Esa a color que te tomaste una tarde
Ibas de traje, más guapo que de costumbre
Olías a lavanda fresca con maderas
Tu sonrisa iluminaba mi tarde, tanto como el sol
Tu mirada me reflejaba la felicidad que tanto pedí
Una fotografía pequeña, tamaño infantil
Con tus ojos grandes y vivos en el centro del cuadrito
Y en el centro de mi vida
Un poco mas abajo tu nariz,
Y justamente ahí debajo estaba tu boca
Esa boca que aparentemente es pequeña
La boca de la sonrisa perfecta.
La imaginé sonreír, apretar los labios
La imaginé saborear mi saliva, como cuando me besó
Y volvieron a mi todos los recuerdos
De esas tardes juntos, cuando mi felicidad eras tú
Y esa mirada me persigue en las noches
Cuando intento absurdamente dormir sin recordarte
Ahora la guardaré de nuevo hasta que pasen muchos años
Antes de que vuelva a encontrarla
Para fingir que no estoy extrañándote.